El Cuexcomate: hijo del Popocatépetl

*Una serie de leyendas envuelven al volcán más pequeño del mundo, ubicado a cinco minutos del centro de la capital poblana

Guadalupe Juárez

Puebla, Pue.- El Cuexcomate te da la oportunidad de estar al interior de una estructura rocosa, en las entrañas de un volcán, mientras el agua  que baja de la montaña de La Malintzi brota como si se tratara de un manantial.

El Cuexcomate es conocido como el volcán más pequeño del mundo, hijo del Popocatépetl y el Iztaccíhuatl, según las leyendas de su nacimiento hace más de mil años, tras una erupción. Su nombre proviene del náhuatl cuexcomatl, que significa olla de barro o lugar para guardar.

De hecho, se dice que los cholultecas solían guardar al interior alimentos, ya que se conservaban mejor, también utilizaban el  orificio para hacer sacrificios o echar cadáveres que no eran velados y sepultados.

Es más, dice otra leyenda, que los habitantes eran llamados hijos del diablo, por los sacrificios humanos que hacían los cholultecas. También porque ahí arrojaban los cadáveres de personas que se suicidaban.

La estructura volcánica está ubicada a cinco minutos del centro de la capital poblana, en la junta auxiliar La Libertad. El Cuexcomate está a 2 mil 150 metros sobre el nivel del mar. Tiene 13 metros de altura.

Sobresale la plaza principal de la junta auxiliar, a un costado del mercado municipal y de la presidencia auxiliar. La entrada cuesta 13 pesos y si encuentras a un guía, él te contará cada una de las leyendas que envuelven el lugar, como la creencia de que hay un túnel que conecta a la pirámide de Cholula.

Al bajar las escaleras en forma de caracol, adornadas con macetas que cuelgan de sus estructuras, te internas con cada paso en el cráter de ocho metros de diámetro. Es estar en las entrañas de un volcán pequeño, aunque ha sido declarado por científicos como inactivo, por lo que es clasificado como géiser, ya que es una abertura de origen volcánico, de la que sobresale vapor, gases y agua muy caliente.

Al interior siempre hay personas curiosas que observan cada estructura volcánica, en la que buscan figuras entre las rocas.

“Dicen que si te caes, llegas a Cholula”, dice un par de niños que se asoman hacia la cascada y analizan el agua que corre.

Esta pequeña estructura volcánica, sigue conectada al Popocatépetl, y dicen, que cada que despierta, el agua al interior se eleva y se calienta.

Además, en el subsuelo, hay venas de agua que conectan con la capital poblana, Cholula y hasta Atlixco.

También se dice que el agua que guarda en su interior proviene de La Malinche y hay una puerta a la pirámide de Cholula.

En la plaza que lleva el mismo nombre, ahora hay un mural, dedicado precisamente a la leyenda de la mujer dormida, aquella historia que humaniza a los dos volcanes y habla de cómo el Popocatépetl era un guerrero arrodillado que se quedó petrificado, cuando su amada falleció al creer que había muerto.

 

 

 

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