César Mendoza, domar la montaña

*Con más de 300 ascensos al Pico de Orizaba y otras decenas a otras cimas del país y el extranjero, el  especialista encontró en su gusto una forma de profesión y de ingresos

Antonio Zamora

Puebla, Pue.- Es el tercer ascenso de la semana a la cima más alta del país, pero César no deja de sorprenderse.

A cargo de un grupo que lo contrató como guía que, por primera vez, está subiendo el Pico de Orizaba y han aprovechado una lluvia que les ha regalado una vista increíble al amanecer.

César Mendoza tiene en Puebla la base de Ice&Rock, una agencia especializada en expediciones a alta montaña en México, Sudamérica y muy pronto a Europa; sueñan con convertirse en una de las primeras en el país que llegue al Himalaya.

“La primera vez que subí una montaña fue hace 19 años cuando tenía 20 y me convenció mi hermano de ir al Iztaccíhuatl porque ya hacía montaña. En ese primer ascenso viví un mix de emociones porque realmente no sabía lo que iba a pasar y la verdad la pasé muy mal”.

Siempre estuvo cercano a las actividades al aire libre como boy scout y la práctica de deportes como futbol y sobre todo basquetbol, el desgaste físico para subir una montaña, además de las condiciones que hay a esas alturas, lo arrolló, pero a su vez, fue el momento que cambió la vida.

“Me dio el mal de montaña, tuve náuseas, vómito y mareos sobre todo cuando dormimos a 4,700 metros de altura, además de que hacía mucho frío porque era temporada de huracanes y juré que jamás iba a volver”, recuerda.

El momento que cambió su vida fue a la mañana siguiente, cuando tuvo que ir al baño y le tocó ver el amanecer con una nevada increíble que había dejado la tormenta y todos los colores que se desprenden.

“Después de esto le pedí a mi hermano que ascendiéramos más y llegamos hasta la zona del glaciar y caminar ahí fue un evento que me cambió para siempre porque a partir de ahí no pude soltar la montaña”.

El impacto de caminar por el glaciar ha provocado que hoy tenga nueve años como guía profesional y siete liderando Ice&Rock con la que hace ascensos a las cumbres más importantes del país, pero también de Sudamérica como en Ecuador, Perú, Bolivia y recientemente el punto más alto del continente, el Aconcagua en Argentina.

“Esto es ahora mi profesión porque es a lo que me dedico y de lo que vivo, pero también es un estilo de vida. Dentro de mis primeros pasos fue tomar cursos y así fue conociendo más y perdiendo miedos porque tenemos un lema que todo lo aprendido no te debe ayudar a subir sino que en un caso de emergencia te debe ayudar a saber cómo bajar”.

Su experiencia le permite afirmar que a los mexicanos les gusta el reto de subir el Pico de Orizaba, pues es el servicio más solicitado, pero también hay quienes valentones se atreven a ascender sin guía, lo que casi siempre termina saliendo mal.

El 2024 le tiene un reto importante por delante a César y a Ice&Rock: todo está listo para que hagan su primera expedición comercial a Mont Blanc en Francia, aunque tampoco desapartan la vista de que en un futuro próximo convertirse de los pocos mexicanos que lleguen al Himalaya.

 

Compartir: