*La ex fábrica textilera se construyó en el siglo XVIII, convirtiéndose en la segunda más antigua del Pueblo Mágico; hoy es escenario de fiestas y postales de los visitantes
Jaime López
Atlixco, Pue.- Es uno de los escenarios mágicos que tiene el municipio de Atlixco: se puede sentir el espíritu y esfuerzo de los primeros trabajadores textileros poblanos.
La ex fábrica de La Carolina, dueña de una majestuosa arquitectura francesa, que como las cosas que valen la pena en la vida, se le debe buscar hasta encontrarla, porque no se localiza a simple vista.
Hoy funge como sede de distintos eventos sociales, celebraciones de boda o reuniones familiares, pero en su momento fue testigo de la lucha obrera atlixquense.
Se edificó en el siglo XVIII, convirtiéndose en la segunda fábrica más antigua del Pueblo Mágico referido, después de La Concha. Fue pensada con una visión social, contó con una gama de servicios cercanos para los obreros, por ejemplo, casas o viviendas en la periferia.
Recorriendo cada uno de sus rincones y echando andar la imaginación, es posible conectarse con el murmullo de las personas que pisaron el lugar.
De acuerdo con testimonios de vecinos o residentes de Atlixco, La Carolina tuvo su mayor apogeo en sus primeros años, alrededor de 1865; posteriormente, con las revueltas sociales suscitadas a principios del siglo XX, enfrentó un periodo de crisis y hasta tuvo una huelga.
Terminando la Revolución Mexicana, retoma actividades con nuevos dueños llegando a funcionar hasta los años ochenta.
Hoy en día, el grupo poblacional conocido como centenials lo percibe como una maravillosa postal que no necesita filtros para hacerlos lucir bien en sus redes sociales, en sus publicaciones.